<body><script type="text/javascript"> function setAttributeOnload(object, attribute, val) { if(window.addEventListener) { window.addEventListener('load', function(){ object[attribute] = val; }, false); } else { window.attachEvent('onload', function(){ object[attribute] = val; }); } } </script> <div id="navbar-iframe-container"></div> <script type="text/javascript" src="https://apis.google.com/js/platform.js"></script> <script type="text/javascript"> gapi.load("gapi.iframes:gapi.iframes.style.bubble", function() { if (gapi.iframes && gapi.iframes.getContext) { gapi.iframes.getContext().openChild({ url: 'https://www.blogger.com/navbar.g?targetBlogID\x3d36306638\x26blogName\x3dSevilla+a+examen\x26publishMode\x3dPUBLISH_MODE_BLOGSPOT\x26navbarType\x3dSILVER\x26layoutType\x3dCLASSIC\x26searchRoot\x3dhttps://sevillaaexamen.blogspot.com/search\x26blogLocale\x3des_ES\x26v\x3d2\x26homepageUrl\x3dhttp://sevillaaexamen.blogspot.com/\x26vt\x3d-3922652398475252999', where: document.getElementById("navbar-iframe-container"), id: "navbar-iframe" }); } }); </script>

El Ojo de Sevilla

23 noviembre 2006

¡Qué de tiempo sin actualizar!.
Que nadie piense que este blog se ha abandonado, ¡ni mucho menos!. Es simplemente por problemas de tiempo. Dos semanas hace que no paro por casa tanto como quisiera. Dos semanas en las que no he tenido tiempo ni de leer los periódicos que me hacen falta. De vez en cuando podía dedicarle diez minutitos a un Diario de Sevilla, o a un 20 Minutos (¡en este me daba tiempo a leer la mitad!). Pero no tenía tiempo de sentarme como es debido y comentar lo que tan contenidamente me guardaba.
Sevilla no ha cambiado mucho en estas dos semanas (no creo que ninguna ciudad tenga posibilidad en tan poco tiempo). Todo sigue igual de "bien". Las obras siguen avanzando según previsto (poco, claro), los sevillanos seguimos pensando que un tren que va a circular por el asfalto es un metro, el alcalde sigue impune por sus talas masivas, los comercios siguen cerrando, el suelo que van a poner en la Avenida de la Constitución y Plaza Nueva nos parece precioso (muy acorde con el entorno), la seguridad sigue es sus niveles más altos, no existen bandas en Sevilla, vivimos en una ciudad barata, nuestro querido gestor, también llamado Alcalde, saldrá vencedor en las próximas elecciones por mayoría (¡qué bien!)... en fin, ¿de qué nos podemos quejar? Si mientras haya fútbol, cerveza y tapitas, ¡esto es gloria!.Menos mal que tenemos la Feria y la Semana Santa...¡que por cierto, como no se den prisa, este año los costaleros tendrán que ir con botas de montaña!.
Hablando ya en serio, eliminando el tono tremendista, en Sevilla no se vive mal. Lo malo es no vivir mejor, porque algunos no quieren, y saberlo. Sevilla sigue igual. Igual de bien y de mal. Y lo malo es eso precisamente...